Por Nelly Alfaro
Ensenada.- Ante los problemas que sigue presentando la carretera escénica en la zona de Salsipuedes, las obras de reforzamiento que está realizando Capufe no son suficientes, declaró el presidente del Consejo Ciudadano de Baja California, Mario Zepeda Jacobo.
Indicó, que sigue latente el riesgo de nuevos deslizamientos, a pesar de la inversión que supuestamente ha hecho la dependencia federal, y al parecer aún no se encuentra la solución técnica final.
“Si a eso le acumulamos los 2 mil 500 millones que SCT estima de costo para una nueva carretera de cuota de aproximadamente 24 kilómetros para cubrir el tramo Bajamar Ensenada, dicho tramo nos costará 4 mil 500 millones, porque al final la vamos a pagar nosotros vía cuotas de peaje, e incremento en los costos de insumos y alimentos”, detalló.
Sin embargo, dijo, hay cuando menos otra opción para resolver el tramo de fallas y prevenir un daño similar al colapso de la carretera de cuota del 2013-2014, como es la construcción de un tramo de carretera alimentadora que comunique ambas carreteras.
La denominada ruta de emergencia, de 6.4 kilómetros, con la cual se evitan las áreas críticas de la carretera de cuota en la zona de Salsipuedes y de la carretera libre en la zona de La Misión.
Esta “Ruta de Emergencia”, recalcó, une a ambas carreteras; la de cuota a la altura de Bajamar con la carretera Libre Tijuana – Ensenada en el kilómetros 74, tiene un costo estimado de 65 millones de pesos si se hace de dos carriles o de 125 millones de cuatro carriles.
“Aunque el primer argumento es la falta de recursos, la SCT tiene presupuesto para mantenimiento de carreteras o bien los propios que tiene el gobierno del estado para obras de caminos vecinales, de ahí se pueden aplicar recursos para construir esta vía, lo que sin duda brindará certidumbre y conectividad a la región”, señaló.
Finalmente, el dirigente del organismo mencionó que al colapsar la carretera de cuota, el trafico se derivó a la carretera libre Tijuana- Ensenada lo que provocó 14 muertes, cientos de accidentes y multimillonarias pérdidas a todas las actividades productivas de la Península de Baja California.
