Por Nelly Alfaro
Ensenada.- El desabasto de agua para los próximos años, afectará las necesidades industriales, comerciales y residenciales para Ensenada, por lo que será necesario un suministro de 1, 500 litros de agua por segundo, declaró el presidente de Consulten, Marco Estudillo Bernal.
Indicó, que con ello se daría abasto y se impulsaría la competitividad y la dignidad como municipio para la atracción de inversiones en el marco de los que será la nueva normalidad económica.
“En 2016, el problema del agua era tal, que los tandeos en prácticamente toda Ensenada, incluido el sector industrial y comercial, nos restó competitividad de manera drástica. En 2021 y 2022 pagaremos la factura sino se toman acciones contundentes”, expresó.
Estudillo Bernal, agregó, que por medio del Grupo Interdisciplinario del Agua (GIA), se establecieron mesas de trabajo técnicas, que avanzan y enfilan a acciones precisas para que se lleve a cabo la segunda etapa de la desaladora en Ensenada.
“No podemos atraer más industria, ni podemos crecer como deberíamos en el tema comercial, porque no podemos abastecerlos del vital líquido, en tanto no se resuelva de fondo, seguiremos condenados a tandeos y falta de inversiones en el municipio”, comentó.
Por otra parte, el coordinador del Grupo Interdisciplinario del Agua (GIA), Javier Barraza, señaló que a diferencia de Tijuana en donde el 40% del agua que se vende es de tarifa comercial e industrial y el 60% restante es residencial, en Ensenada no se llega ni al 10% de tarifa industrial y comercial, ya que no se tiene el abasto suficiente.
2da. Etapa Desaladora
Coincidieron con el Secretario del Agua en que la ruta más viable es la segunda etapa de la desaladora, que agregaría 250 litros por segundo a los 950 que ahorita se generan y que permitiría llegar a los 1, 200 mínimos como requerimiento actual, pero que hacia el 2025 tendría que ajustarse otro proyecto para lograr los 1, 500 litros por segundo que se requieren.
“La gente está dispuesta a pagar más por el agua, porque hay conciencia en las colonias más marginadas, que cuando falta el vital líquido, comprar un tibor puede costar hasta 200 pesos, cuando el servicio mensual no llega a los 100 pesos, por lo que el incremento, en el costo beneficio de corto, mediano y largo plazo, estaría justificado para lograr la inversión para la segunda etapa de la desladora”, refirió.
Agregó que al construirse la segunda etapa de la desaladora el costo del agua en bloque que hoy se paga a casi 30 pesos el metro cúbico, disminuiría a cerca de 20 pesos por que cuando se hizo la primera etapa se pagó casi el 50% de la segunda etapa que a la fecha no se utiliza.