Por Redacción

Ensenada.-El incremento de hasta el 20% en el precio de la gasolina y el diesel tendrá un efecto negativo en el costo y calidad de vida de la población, afirmó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación de Ensenada (Canacintra) Jorge Eduardo Cortés Ríos.

Aunque las autoridades hacendarias han dicho que el impacto será pasajero durante los primeros meses del 2017, las proyecciones de las empresas prevén un incremento importante en los costos de producción, transporte y distribución de diversas mercancías.

El daño será aún mayor en Baja California, particularmente en Ensenada por el alza de hasta el 20% en el precio del agua, predial, peaje y encarecimiento del dólar, entre otros, cuyos efectos inflacionarios pudieran estar por encima del 4% previsto por el Banco de México para 2017.

El dirigente hizo un enérgico llamado a los legisladores federales y locales para que hagan todo lo posible por detener esta oleada alcista que deteriorará aún más el nivel de vida de la población, principalmente de la clase trabajadora y consumidores de bajos recursos que a final de cuenta sufrirán las consecuencias de ver disminuido dramáticamente su poder adquisitivo.

Criticó la visión de los legisladores alejada de la realidad, quizá influenciados por la bonanza que registran sus bolsillos con los grandes sueldos y privilegios de los que disfrutan, mientras que el resto de la población enfrenta serias dificultades para sobrevivir.

El panorama para el 2017 es sombrío, consideró, la incertidumbre es una constante que está frenando las inversiones y nuevos proyectos de negocios, la disparidad del dólar está encareciendo la actividad industrial para el consumo interno, los precios del petróleo son inestables y la política estadounidense una amenaza para México.

Hacer y conservar las empresas es cada día más complicado, advirtió, el acoso de las autoridades hacendarias, Seguro Social, Infonavit, las trabas burocráticas y la lentitud de los gobiernos para crear o mantener la infraestructura, ponen a las empresas en la puerta de la informalidad.

Reiteró el llamado a representantes populares de los tres niveles de gobierno “a ponerse las pilas” y trabajar seria y objetivamente en evitar que el país caiga en una aún más grave crisis económica de la que después le sea más difícil recuperarse.