Por Martín Espinoza
Ensenada.- En Ensenada tenemos problemas de comunicación. Desde que en este momento estamos incomunicados de una manera eficiente en materia transitoria. En serio, no sé cómo me van a creer mis nietos en un futuro cuando pasemos con nuestro auto volador por encima de la carretera a Tijuana y les diga «Saben? Más o menos cuando conocí a su abuela, ese camino se hundió por un temblor», y como el sistema de educacion en ese tiempo ya va a estar bien adelantado, mis nietos van a tener nociones de infraestructura, y me van a decir «Ay abuelo, no creo que en tus tiempos los encargados de interés federal hayan sido tan descuidados para no pensar que la isla de california iba a separarse y dejar de se península a causa de la falla de San Andrés»…Bueno, a lo mejor no serán tan exactos, pero algo así se puede avecinar.
Es un problema esto de cómo acreditar los extraños mitos que tendremos que justificarles a las generaciones venideras. «Cuando yo andaba en mi primer auto, no había ciclovías, y casi atropellábamos a todos los ciclistas diariamente». Dirán: «Oye abuelo, y el gobierno era tan inconsciente para no pensar en la pluriculturalidad y en los transportes alternos?» «Pues mira, hijo, tan fácil te diré que los estudiantes llegaron a tomar el transporte público a 42 pesos».
Mi nieto abrirá sus tiernos ojos de par en par incrédulo y me dirá que es imposible, por que en ese futuro de seres avanzados, hemos tomado modelos de desarrollo civil como los de Japón y ellos pueden transportarse simplemente dando algun material reciclado.
Ya entrado en mis historias les contare de como el puente subterráneo que da a la UABC, en mis tiempos solía pasar por encima del tránsito, teniendo su acceso a los lados de la carretera más transitada del estado y entorpeciendo el tráfico.
En verdad se han puesto a pensar qué les vamos a decir? Que nuestros presidentes eran rancheros bufones, perros de la milicia y gente que no leía ni los subtítulos en las películas?
Pero sobre todo, que en nuestra ciudad, rica en oportunidades, con un clima hermoso y con facilidades para fungir como epicentro de tránsito acuático, era tan desperdiciada.
En verdad, tenemos el recurso mas importante para la habitación: un clima óptimo. El cual debería ser gastado para inversion. O sea, Cancún es bien acalorado y tiene mejor inversión turística. Tenemos la playa y los vinos, pero aun así nuestro sello de distinción más grande es el Papas and Beer (y no me lo tomen a mal, que es un atino como estrategia de mercadeo el lugar ese, y aun así, mandan su éxito a Rosarito). Tenemos la Bufadora, por Dios, y bien que mal fue creciendo en los últimos años, pero si alguien le pusiera la atención que debe, mantendría una instalación optima y explotable para volverlo un destino de la talla única que se merece (dos de esas en todo el mundo, y el lugar no tiene siquiera baños limpios).
Ensenada es un lugar mal planeado, que desde su conformación se construyó al ahí se va. Teníamos como tres calles principales y de ahí se fueron haciendo conforme donde cabían. Y nadie pensó que este puertecito fuera a convertirse en la ciudad del tamaño que ahora tiene. Ahí vemos cómo le dieron con todo al ex hotel casino El Riviera, que era una riqueza, tanto en historia como en valor de muebles. Pero al momento de pasarlo a patrimonio, las cosas se desaparecieron de los registros. Al cabo, quién se iba a fijar? Y ya entrando en esa misma zona, esa concesión interminable que es el museo Caracol. Que además de ser de iniciativa privada (se supone que va a cobrar) tapa la vista al mar que alguna vez fue icónica. Nuestra ciudad es un reflejo en micro de un progreso que a su gobierno le vale.
Este concepto se refleja ahora en la pésima vialidad. Desde tomar en cuenta que aquí nadie sabe manejar (en serio gente: las glorietas tienen que rodearse, no cortarse, y el carril izquierdo es rápido) hasta la falta de alivio de las vías. Tenemos: el Costero, La Reforma, el Libramiento, la Nueve y la que pasa por la moderna que no me acuerdo cómo se llama. Todo eso, a la hora que la gente sale de trabajar, se vuelve inhabitable. No digo que en una ciudad mejor planeada no hay tráfico, pero al menos hay autopistas.
Y luego con esto de la pluriculturalidad, nomás hay una marcha, un desfile, una baja 500 o un paseo ciclista, y dónde se les ocurre ponerlo? En una de las vias principales, asi es. No en donde no estorbe. Para qué? Nadie tiene cosas que hacer en día de carnaval o si?
Esas planeaciones viales son hilarantes ya después de que llegas a tu casa y le recuerdas a sus madresitas a todo el que se te atraviesa.
Habría que invitar a nuestro respetable escuadrón de regidores o gobernantes a que echaran un ojo al desarrollo civil. Que ademas de todo se supone que contamos con una de las universidades de mayor prestigio que saca ingenieros de altura, seria bueno hacer uso de sus sugerencias y que quienes manejan la producción los escucharan.