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Y nos tenían con el Pendiente

Por Martín Espinoza

Ensenada.-La semana pasada ocurrió un accidente mediático que me tuvo bastante entrado en risas y diversión, y luego me hizo fruncir el ceño preocupado. Hablo del caso de Carmen Salinas en un puesto público de educación.

Primero estaba preocupado por este rubro de gobierno, pero después me empecé a preocupar por este cuarto poder tan mal efectuado que tenemos.

La mañana en que salió la noticia yo me agarré de mi laptop al ver el encabezado. “Carmen Salinas nombrada representante del SNTE” o algo así. Me causó una carcajada ahogada por una parálisis corporal casi entera. Pensé en qué país les iba a contar a mis hijos que es mi México. Que cuando estaban chiquitos una vez nos gobernó un señor que vendió la mitad del país, luego nos gobernó un ranchero, luego uno que tenía el bagaje cultural de un niño de tercero. Y al final les iba a decir que cuando decidí irme de él, habían nombrado a una señora que hacía telenovelas y shows de congal como líder de sindicato de maestros. De nuestro apreciado ministerio de educación del que dependen nuestros hijitos (digo, no tengo hijos, pero me imagino que así ha de preocuparle a uno).

Claro, esto posterior a quitar a la otra señora que habían metido a la cárcel por andarse robando los dineros de los pobresores. Qué México y qué sistema educativo tan rodeado de tormentas tenemos.

La cosa buena, es que al día siguiente, salió una noticia en todos los medios de que esto era una falsa alarma. Yo me quedé de “Qué? Entonces dónde había visto esa información?”. Retrocedí mis pasos a ver si de nuevo el Deforma había hecho una de las suyas y me había engañado un día anterior. Pero no, había sido un periódico local la primera fuente de mi malinformación. Esto lo hice para constatar que el resto de los medios no tomaron, como yo, una broma demasiado en serio. Pero no, el periódico local solo estaba repitiendo lo mismo que el resto del país percibió por un día entero: Aventurera como líder sindical.

Así que todos…pero todos los medios estaban con la misma idea. Al día siguiente Carmencita publicó desde su tuiter que todo había sido un malentendido, que ella nomás estaba acompañando a Jesús Gallego a recibir el reconocimiento.

Entonces la cosa estuvo de que un periodista que cubrió el evento la miró y dijo: “no manches! Carmen Salinas se subió! Es la presidenta de Méjico wey!” O algo así. En lugar de confirmar con fuentes, mirar los directorios de la sección 11 del SNTE, o simple y sencillamente limpiarse las orejas y escuchar a quién estaban nombrando para qué puesto.

Qué vergüenza, periódicos y demás de México. Yo estudié comunicación, y ese tipo de acciones son falta de profesionalismo. Eso de agarrar en el aire el chisme y no confrontar los hechos y las pruebas antes de sacarlos en un medio que la gente va a leer y lo va a tomar como verdad, en mi saloncito con mi profesorcita sabíamos que era una obscenidad.

Así que mis niños, ya no sé cómo le vamos a hacer para estar bien informados, si ni siquiera en las noticias que de veras importan a nivel nacional podemos confiar. Ni cuando son noticias reales distintas al mundial, o la baja 500 o los perros muertos. Ni en eso podemos estar seguros, entonces a quién acudimos? Invito a los comunicadores y comunicólogos colocados en puestos y los que aún estamos sin trabajar en medios que eleven la batuta, porque de nosotros depende lo que sabe la gente, de nosotros depende la realidad que se estaciona en las mentes de nuestro México.




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